Podría decir:

Luna, cuéntame lo que miras…

¿lo ves cada noche cuando camina?

¿Anda sin rumbo o es una gran mentira?

Pero este amor no entiende de poesía

Podría calcular que tan lejos está el horizonte

En el momento exacto que cae la noche

Y pensar que ahí llegaré a buscarte

Pero igual esta noche no iré a amarte

Me duelen las ganas y el sentimiento

Y sin embargo me aferro a ellos

Quisiera besarte y desechar mis miedos

Pero solo puedo verte a los ojos en mis recuerdos

Digamos...

Digamos que esta noche me quede sin argumentos,

que preferí callarme a confesar todos mis miedos.

Digamos que no puedo sacarte de mi pensamiento.

que mi sonrisa es solo para fingir que no te quiero.

Digamos que he sido tuya alguna vez en sueños,

que daría lo que fuera porque fueran hechos.

Digamos que me gustan tus dedos en mi cabello,

en mis labios tus besos y en tus ojos mi reflejo.

Digamos que te contaría un par de secretos,

que de hecho eres protagonista de todos ellos.

digamos que tú te sientes igual en silencio:

¿Qué hago yo acá y tu allá tan lejos?

Como ya debes saber soy adicta al café
A su amargo aroma en las mañanas
A los dulces de leche y al Chai de manzana
A las películas y al jengibre con limón y miel

¿Pero será que logras entender
Cuanto adoro cada una de tus miradas
El sonido de tu voz cuando cantas
O los cinco mil gestos que hace a la vez?

Si tan lejos de mi, allá donde estés.
sabes cuanto extraño hablar hasta la madrugada
que me hables al oído mientras me tienes abrazada
y a tus suaves manos recorriendo mi piel

Me pregunto si algún dia te tendré
por algo mas que el breve instante
o si algún día conmigo decidiras quedarte
o por lo menos si te volveré a ver.

Capullo de flor

Caprichos

Del otro lado del espejo

Aún sigo teniendo el mismo sueño,
en que estamos frente a un espejo
y nos espiamos desde aquel universo,
queriendo atrapar en un segundo
un centenar de recuerdos

Estamos allí sin movernos
tus ojos fijos en los míos
los míos sobre todo tu cuerpo
memorizando hasta el último cabello

Mi cabeza apoyada en tu pecho
mis manos cubriendo tus dedos
allí tan cerca mi cuerpo del tuyo
que podríamos fundirnos en uno

Tu voz se hace un hilo a lo lejos
historias,  susurros,  lamentos,
todos mueren en tus labios bellos,
que para mis oídos están en silencio
pero quietos los dos ahí permanecemos

Algún día despertaré de este sueño
aun así del otro lado del espejo
tus brazos aun rodearán mi cuerpo
tus palabras serán mi aliento
y tus besos serán mi sustento

andas como loco dando vueltas en mi mente

por el oscuro rojo que tiñe el cielo al anochecer,

y en la etiqueta del vino que quedo sin beber

o incluso en el gesto desprevenido de la gente

me nombras de a ratos  en un suspiro sugerente

entre las telarañas que en sueño logre  tejer

para quedarme contigo y así poderte querer

aunque con cada despertar te pierda nuevamente